1911. El "Consegliere" 1l5s5j

Por la señal de la Santa Cruz de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro, en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.

Señor mío y Dios mío, creo firmemente que estás aquí, que me ves, que me oyes. Te adoro con profunda reverencia.

Te pido perdón de mis pecados y gracia para hacer con fruto, junto al Espíritu Santo, este rato de oración. Madre mía inmaculada, San José mi Padre y Señor, ángel de mi guarda, intercede por mí.

Muchas veces he visto con asombro cómo hay personas que toman una decisión difícil de una manera segura, rápida y acertando. Por ejemplo, un chico que después de un periodo de dudas llega y dice bueno ya está he cortado con mi novia lo he visto claro y esto aunque me duele lo he visto claro. No es la persona que Dios quiere para mí.

No nos estamos haciendo el bien que deberíamos estarnos haciendo. O una chica que de repente le pregunto si está haciendo la oración y me dice que sí, pero no la hago en este sitio sino en este otro porque ahí Jesús está tan solo en ese oratorio, en esa capilla del hospital donde hago mis prácticas, que voy allí a hacer la oración porque así acompaño a Jesús.

O un chico que decide cambiar de trabajo para ayudar más a la gente. Un chico, un joven ya con una buena posición relativamente, que decide dejar eso y meterse en otra cosa completamente distinta, repito, porque piensa que así puede hacer más bien a más gente y no solamente ganar dinero. Como escuché hace ya unos meses en la BBC, entrevistaban a una chica que era guerrillera de las Farc y que se había quedado embarazada y vivían pues no sabía ni quién era el padre realmente y entonces vivían como una especie de comuna tal y entonces le dijeron que abortara pero ella se escapó ahí en la jungla y consiguió pues nada llegar a la civilización, explicar tal, le metieron en la cárcel pero consiguió tener su bebé y entonces explicaba una vida es sagrada.

Una persona que digo cómo ha podido llegar esta persona a esta condición tan firme con tanta seguridad porque señor no es fácil tantas veces yo no sé qué hacer hay como dos soluciones que me parecen igual de malas o igual de buenas y digo pero qué hago. Cómo entiendo al salmista que nos dice muéstrame O Yahvé tus caminos guíame por la senda recta. ¿Cuántas veces hemos rezado nosotros así señor? Señor muéstrame tus caminos ¿qué debo hacer? y la respuesta de Yahvé tantas veces es como dice otro salmo yo te haré saber y te enseñaré el camino que debes seguir seré tu consejero y estarán mis ojos sobre ti Consejeros. Está hablando de Yahve este salmo del Espíritu Santo y del don de consejo. No sé si has visto la película El Padrino bueno seguro que sí porque es un clásico.

Ahí aparece muchos personajes pero hay un personaje siempre que es muy importante que es el Consiglieri es el consejero de la familia una persona que tiene la suficiente frialdad como para ver las cosas desde fuera y no dejarse llevar por apasionamientos y da un consejo sobre lo que le parece que es mejor para la mafia para esa familia mafiosa no para lo que sea y realmente se ve que cuando le hacen caso las cosas van mucho mejor que cuando no le hacen caso.

Bueno pues el Espíritu Santo es nuestro Consiglieri nuestro mejor consejero nosotros no somos mafiosos pero es un ejemplo nada más Él nos guía por el camino de la vida mejor que nadie y lo hace con este don de consejo que es un instinto divino para decidir con rectitud rapidez y acierto el camino que más conviene aquí y ahora en un caso concreto para la gloria de Dios y el bien de las almas es algo que nos dice lo que hemos de hacer no lo que es mejor sino lo que hemos de hacer aquí y ahora Señor concédenos esto porque es la solución a tantas de nuestras dudas y angustias ¿qué hay que hacer? ¿qué debo hacer? ¿cómo haré esto? ¿cómo tal? Es un instinto divino