TOM THIBODEAU DESPEDIDO DE LOS NEW YORK KNICKS | Episodio 1275 24232w

¿Estáis escuchando? ¡Dios mío! ¿Qué pasa, bowlers? Bienvenidos a Massive Bowl, tu podcast de opinión de la mejor liga de baloncesto del mundo.

La NBA no descansa.

Tom Thibodeau ha sido despedido por los New York Knicks.

Es el tercer podcast que grabamos hoy.

Esta mañana hemos hablado del Draft, esta tarde con Sergio hemos hablado de posibles destinos para Jensen y Tokumpo.

Ya tenía organizado el podcast de mañana por la mañana.

Por la tarde tendréis el podcast de los James.

Y, de repente, cuando me estaba preparando la cena, además se le ha mostrado a Iker, digo hoy he trabajado mucho, me lo merezco, me voy a hacer una hamburguesita.

He ido a la carnicería. Bueno, hamburguesita.

Quien quiera entender que lo entienda, hamburguesita.

He ido a la carnicería, me he comprado carne picada, he ido al súper, me he comprado un pan brioche, me he hecho unas patatitas al air fryer, tal.

Con mi salsita preferida, que además me la he hecho yo también, y pum, pum, de repente, leemos que, por sans charagne, los New York Knicks despiden a Tom Thibodeau.

Y tenemos que reaccionar, tenemos que estar en directo con vosotros, tenemos que grabar para podcast, para YouTube, porque Massive Ball está aquí siempre al pie del cañón.

Massive Ball es el mejor podcast del mundo y aquí estamos con vosotros reaccionando suceda lo que suceda.

Y guste más o guste menos, pues los New York Knicks son una de las franquicias más mediáticas y con más foco de toda la NBA.

Y no es lo mismo que despidan el entrenador de los New York Knicks.

Cuando está en un momento la franquicia competitivo llegando a finales de conferencia y ganando, con todo el contexto y el background previo de lo que tenemos aquí, Sergio, Iker y yo, de Tom Thibodeau, pues no es lo mismo que se despida a Tom Thibodeau que se despida al entrenador de otra franquicia.

No quiero nombrar a ninguna otra.

Pero merece un podcast especial y un directo especial con todos vosotros.

Y, cómo no, pues aquí había que estar con Sergio.

¿Qué tal, Sergio? ¿Cómo estás? La gente te da el pésame.

Ah, pésame tampoco.

Bueno, ahí andamos.

Es que, a ver, lo voy a decir ya.

He bebido dos despidos de entrenadores de mis dos franquicias favoritas.

La de Mike Brown me enteré mientras cenaba con amigos.

O sea, un remanso de paz.

Y sentí tristeza porque era algo que se veía venir.

La de Tom Thibodeau me he enterado mientras estaba andando.

Después de escuchar el podcast tan bueno que se han sacado Gonzalo Vázquez y Andrés Monge sobre Thibodeau, cuando voy a andar y me pongo un podcast, es otro remanso de paz.

Y, otra vez, en momentos de remanso de paz, echan a un entrenador que ha rescatado una franquicia ahora mismo.

Y, al contrario de Mike Brown, que sentí tristeza porque, aunque no lo creía, era algo que se veía venir, ahora siento mucha rabia.

Mucho enfado, porque no tiene sentido.

Iba a presentar a Iker, pero está aquí con el corrientazo.

Está ahí metiendo el corrientazo.

No sé si ya estás operativo, Iker.

Porque, como le estoy escuchando a Sergio como un robot, pues entiendo ya lo que pasa en esta puñetera.

¿Se le escucha como un robot o era...? No, no, es Iker.

No, no, te escuchaba yo a ti.

Ya sabía yo que era por mi conexión.

Bueno, he intentado tirar sin cable, pero bueno, no sé.

No sé. Estos de Vodafone son unos sinvergüenzas y es lo que hay.

O tiras de cable o el wifi es una absoluta estafa.

Iker, lo primero que te quiero preguntar, y esto quiero que seas sincero, ¿estás triste o estás contento? A ver, yo estoy triste.

O sea, quiero decir, tú cuando...

Cuando separas los caminos con una persona a la que llevas o que has seguido de muy cerca durante tanto tiempo y que tanto ha hecho por tu equipo, no puedes no sentir tristeza en un primer momento.

Yo no sé si el movimiento es acertado o no, hasta que no conozcamos el sustituto.

Es todavía muy pronto saber si esta decisión es acertada o no.

Pero es que Tibo Do, yo voy a ser bastante contundente con esto.

Creo que Tibo Do es el mejor entrenador de la historia de los Knicks.

¡Boh! Yo estoy mirando números.

Sin ninguna duda, el mejor entrenador de la historia de los Knicks en el siglo XXI era algo bastante barato, bastante baratito, porque te quedas con Mike Buxton, Dan Tony, si me apuras, y los números de Tibo Do arrasan por completo a estos dos, tanto en partidos ganados, partidos totales.

Sin duda, el entrenador que más lejos ha llegado esta temporada.

Es la mejor temporada de los Knicks desde la 98-99, que llegaron a la final y fue un 4-0.

Bye.