Un puñetazo en el estómago: África atraviesa la pantalla (DOCUMENTAL SONORO - CARNE CRUDA #1525) 18693d

¿Quién era? ¿Quién es Samia? Samia es simplemente una heroína, una heroína somala, se dice así en español.

Somalí.

Somalí. Para mí, una fuente de inspiración excepcional.

Yo creo que yo soy Samia, tú eres Samia.

Aquí, en Italia, en América, en China.

Ser mujer es difícil, siempre.

¿Por qué decidiste tú grabar este viaje con todas las dificultades que conlleva grabar en estas condiciones? Porque conseguí una cámara, porque un amigo me la regaló.

De ninguna manera pensé que eso iba a convertirse en una película.

¿Y ellos quiénes son, Violeta? Ellos son Deka y David, una directora de cine de origen somalí y un director camerunés con los que estuve en el Festival de Cine Africano de Tarifa y Tanger.

Sí, lo hemos anunciado estos días. ¿Cómo te fue? Pues mira, el festival es un oasis para hablar de los desiertos y de los infiernos de quienes tienen poco o nada y sufren la violencia, pero también una visión de África más allá de tópicos paternalistas, de noticias catastróficas.

¿Tú sabes esa sensación de que la actualidad no te cuenta la realidad? Bueno, totalmente.

Pues esto fue un baño de realidad, de vida, de humor, de terror, de humanidad.

Hoy vamos a cruzar el estrecho, esos escasos 14 kilómetros que nos separan de África para hablar del cine africano tan desconocido como el continente.

De hecho, decir cine africano es como decir cine europeo, reducir la realidad diversa de 54 países al marco de una pantalla.

Si de algo me di cuenta es de que intentamos meter a toda África en el mismo saco, pero África rebasa, evidentemente, todos nuestros marcos mentales.

¿Pero hay algo que una a los distintos cines africanos? Pues, como me decía Sowad, es un cine...

Raro, resiliente, luminoso.

Escaso, resiliente y luminoso.

Es decir, hay poco, pero se adapta a todas las dificultades y, pese a la oscuridad de muchas historias, también es profundamente vitalista.

Luminoso.

Y sorprendente y atrevido y militante y diverso, como este Aisha Kandisha.

¿Cómo suena esto? ¡Qué barbaridad! ¿Quién es? Ella es Restinga, una artista marroquía fincada en Sevilla que acaba de publicar un disco de orillas, de mezclas, de rupturas, llamado Free Baby.

Y, por cierto, este jueves 5 toca en la Picnic Session del Centro 2 de Mayo de Móstoles, en Madrid.

Libre, muy libre.

Muy libre.

He estado escuchando este disco por recomendación tuya y me ha volado la cabeza.

Es que es tremendo, yo no puedo parar de escucharlo.

Yo tampoco, yo tampoco.

Este tema, Aisha Kandisha, es el nombre de una mujer demonio de la mitología marroquí que habita en las zonas de agua como Tánger y aprovecha su gran belleza para vengarse de los hombres que son violentos con las mujeres.

¿A Tánger te fuiste? Sí, para cruzar desde allí el estrecho y unir las dos orillas como hace el Festival de Cine Africano de Tarifa y Tánger.

Protagonista de...

Los documentales de carne cruda.

En el que os voy a hablar de muchos cineastas y películas, pero sobre todo de las vidas paralelas y antagónicas de dos de ellos, de Decay y David, a los que escuchábamos al inicio, cuyas historias propias y ajenas se han cruzado varias veces en el mundo.