Misterios de la Historia e Historias del Misterio 1b3lb

Corría el año 1899, cuando el expresidente de la Primera República Española, Emilio Castelar, buscó sosiego en la brisa del Mar Menor, en una residencia en San Pedro del Pinatar, donde el 25 de mayo exhaló su último aliento.

Pero su legado quedó grabado en los libros de historia y en las sombras de aquella casa.

Desde entonces, un inquietante presagio recorre sus muros.

La leyenda cuenta que cuando el reloj de la casa se detiene, anuncia un fallecimiento, un aviso del destino o un fenómeno más allá de la lógica.

Es un elemento más donde la historia y el misterio se funden en San Pedro del Pinatar, como en el Museo del Barón de Benifallo, donde la sombra del fantasma de la princesa rusa todavía se siente.

Bienvenidos a un viaje donde el tiempo no siempre obedece las reglas, donde la historia aún susurra en la brisa y donde el misterio sigue latiendo en cada rincón.

La realidad que nos envuelve puede ser un espejismo, un escenario fantástico e inexistente que nuestros sentidos sólo llegan a imaginar.

Lo que creemos conocer es tan sólo la fugaz huella de un saber, oculto tras un insondable velo que la razón se esfuerza por rasgar.

Pero todos los arcanos, todos los oráculos, todos los secretos que la humanidad ha buscado San Tregua en los confines del universo, podrían estar mucho más cerca en lo más recóndito de su alma.

Y es que el conocimiento es una luz, un resplandor que habita al final de una escalera, la escalera del misterio.

Una energía vital que iluminará el entendimiento de los que alcancen el último peldaño.

El último peldaño. Dirige y presenta Joaquín Abenza.

Amigos, buenas noches. Bienvenidos una semana más al último peldaño.

Once minutos pasan de las once, ese momento mágico en que cada viernes comenzamos.

El rato de misterio que desde hace ya 34 años tenemos en Onda Regional.

Hoy estamos en San Pedro del Pinatar, estamos en el Teatro Geli Albaladejo.

Estamos muy bien rodeados.

Yo siempre que salimos a una emisión en directo con mucho público como esta noche, que tenemos aquí a 300 personas, siempre pido un aplauso para que todos los que están en casa se sientan también parte de este momento.

Así que por favor un aplauso para todos los que nos están escuchando.

Muchísimas gracias en nombre de todos nuestros oyentes, de todas las personas que ahora desde sus casas nos reciben y reciben ese calor.

Esta noche vamos a hacer un programa especial.

Tenemos con nosotros a los ponentes del III Congreso Nacional de Historia y Misterio.

Eso no se tiene todos los días.

Y con ellos vamos a hablar no solamente de lo que nos van a contar en sus ponencias que empiezan mañana, sino también aquellas otras cosas que sabemos que les interesan a todos ustedes y que podemos aprovechar este momento para que ellos nos lo cuenten.

Personas como la doctora Ana María Vázquez Hoys, como Gonzalo Pérez Arró, como Ignacio Martín Cuadrado, como Luis de Uriarte, como Javier Pérez Campos, como el doctor José Cabrera.

Personas que llevan muchos años investigando y divulgando tanto la historia como el misterio y que esta noche nos van a aportar todo lo que ellos saben y todo lo que ellos tienen para nosotros.

La verdad es que es un momento mágico, como digo, y ese momento mágico no sería posible sin Paco Valera, que se encuentra en onda regional, en los estudios centrales, y sin Antonio Conchillo, aquí en el Teatro Gélida Valdejo.

Y antes del micrófono, Joaquín Abenza.

San Pedro del Pinatar es un lugar donde la historia y la naturaleza se entrelazan de manera única.

Su legado se remonta a tiempos de fenicios y romanos, quienes aprovecharon la riqueza de sus aguas para la pesca y la producción de sal.

Además de su historia, este enclave es también un tesoro ecológico.

El Parque Regional de las Salinas y Arenales es un refugio para numerosas especies de aves y un ecosistema clave para la biodiversidad mediterránea.

Este equilibrio entre tradición y naturaleza convierte a San Pedro del Pinatar en un lugar donde el pasado y el presente conviven en misteriosa armonía.

Pues esa misteriosa armonía que hace posible que ya tres años seguidos tengamos este Congreso Nacional de Historia y Misterio, ha sido, yo creo que, muy bien recogida por todos.